Aunque no es un utensilio indispensable, ya que los biberones pueden calentarse de otras formas, sí nos hace la vida más sencilla y rápida. Por eso, si quieres comprarte un calientabiberones, deberás tener en cuenta unos cuantos consejos antes de elegir.
¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar un calientabiberones?
- El tiempo que tarda en calentar: el objetivo principal de un calientabiberones es la rapidez, por lo que es importante comprobar cuánto tiempo tarda en calentar ya que, según el modelo, puede ser más o menos. Un buen tiempo de calentamiento es 4 minutos para 240 ml para alcanzar 38° C.
- Si es universal o no, es decir, si se puede usar con biberones de la mayoría de las marcas y de diversos tamaños, lo cual es importante ya que nunca se sabe cuál será el biberón favorito del niño o si le gustarán varios modelos diferentes.
- La cantidad de biberones que puede calentar a la vez, lo cual puede ser muy útil, sobre todo en caso de mellizos o gemelos.
- Si cuenta con alarma sonora con apagado automático que evite el sobrecalentamiento, lo que puede evitar posibles accidentes y te avisa de cuándo está listo sin que tengas que estar delante pendiente.
- El precio, ya que varía mucho según sus funcionalidades, tamaño, rapidez, características… Tendrás que ajustarte a tu presupuesto.
- Si también esteriliza. Algunos incorporan esta funcionalidad y, además de calentar, esterilizan los biberones y otros accesorios pequeños, como los chupetes, lo cual es muy práctico y cómodo y te permite ahorrar espacio en la cocina.
- El diseño y el tamaño, para que no abarque demasiado espacio y quede bien en tu cocina.
- Y, por supuesto, asegúrate de que tiene la marca CE y cumple con todos los requisitos de seguridad.
¿Es necesario comprar un calientabiberón?
El calientabiberones no es un utensilio imprescindible como la cuna o el carrito, pero sí es muy útil y puede hacerte tu vida más fácil ya que, si bien es cierto que los biberones pueden calentarse al baño María, este método tarda más y es más engorroso que meter varios biberones ya preparados en el calientabiberones y tenerlos listos en unos segundos. Por lo tanto, uno de sus mayores beneficios es que ahorra tiempo.
Es más seguro que el microondas, que no se aconseja para calentar la leche del bebé ya que no calienta de manera homogénea y, además, puede hacer que se pierdan algunos nutrientes.
Además, estos aparatos permiten programar el tiempo y el la temperatura según el tamaño del biberón y la cantidad de leche, así como las preferencias de tu bebé, y una vez sepas el tiempo ideal, tendrás el biberón siempre listo sin riesgo de quemaduras.
De esta forma, puedes conservar biberones ya listos o leche materna extraída en la nevera sabiendo que luego podrás calentarlo fácil y rápidamente.
Por último, los calientabiberones se pueden usar también con leche materna extraída, por lo que puede ser muy útil desde el primer mes de vida del pequeño. Y, como decíamos, dejan la leche a la temperatura adecuada, impidiendo que esta hierva (algo muy importante ya que la leche materna al hervir pierde sus propiedades).
¿Qué tipos de calientabiberones existen?
Existen diversos tipos de calientabiberones:
- De viaje, que pueden conectarse al coche para calentarlos en cualquier sitio.
- Exprés, que calientan en menos de 30 segundos.
- Gemelares, que permiten introducir más biberones.
- Programables, útiles para las tomas nocturnas.
A la hora de elegir, deberás tener en cuenta tus necesidades.
¿Cómo funciona un calientabiberones?
Los calientabiberones son aparatos electrónicos que básicamente hacen la misma función que calentar al baño María. Para ello, cuentan con un envase en el que se echa agua que se calienta eléctricamente con un termostato que controla que la temperatura no exceda de su punto óptimo.
Algunos modelos funcionan al vapor o como máquinas de expresos, mientras que otros utilizan reguladores de temperatura configurables.
Esto hace que tú solo tengas que meter el biberón o biberones dentro y regular la temperatura y el tiempo.
Después, es conveniente limpiarlo tras cada uso con un paño húmedo y desconectarlo para que no siga gastando energía.
¿A qué temperatura debe estar la leche del biberón?
La leche materna sale del cuerpo aproximadamente a unos 32º C. Por eso se aconseja que temperatura del biberón, sea de leche materna o de fórmula para lactantes, no pase de los 35 o 36º C.
No obstante, la temperatura del biberón es algo muy personal y hay bebés que la prefieren del tiempo, mientras que a otros les gusta más calentita. Deberás averiguar cuál es el gusto personal de tu hijo y ofrecerle la leche como prefiera, aunque siempre teniendo cuidado que no queme ya que podría causarle quemaduras en la boca.
También hay bebés que prefieren que solo la tetina esté caliente, lo que puedes conseguir poniendo la tetina debajo de agua tibia durante unos segundos.
Fuente:
Guía de lactancia materna, Asociación Española de Pediatría. http://www.aeped.es/sites/default/files/7-guia_baleares_esp.pdf