Las hormonas, los miedos, las preocupaciones… son las causas principales de muchos de los cambios emocionales que se experimentan en estos meses de embarazo. Descubre cuáles son los cambios principales y cómo hacerles frente.
¿Por qué se sufren tantos cambios emocionales en el embarazo?
Los cambios emocionales durante el embarazo pueden atribuirse a una combinación de factores biológicos, hormonales, psicológicos y sociales. Entre las principales causas de estos cambios son:
– Fluctuaciones hormonales: durante el embarazo, el cuerpo de la mujer experimenta cambios significativos en los niveles hormonales, especialmente en las hormonas reproductivas como el estrógeno y la progesterona. Estas fluctuaciones hormonales pueden tener un impacto en el estado de ánimo y las emociones ya que influyen en muchos neurotransmisores que afectan a nuestro estado de ánimo.
– Cambios físicos: la gestación implica una serie de cambios físicos, como aumento de peso, cambios en el tamaño de la tripa y los senos, hinchazón de manos y pies…. Estos cambios pueden afectar la percepción de la propia imagen y generar emociones relacionadas con la autoestima y la confianza.
– Estrés y ansiedad: el embarazo puede ser un momento de gran estrés y ansiedad debido a las preocupaciones sobre la salud del bebé, la preparación para el parto, la maternidad/paternidad, las responsabilidades futuras y las posibles complicaciones durante el embarazo.
– Cambios en la vida social y roles: la llegada de un bebé suele implicar importantes cambios en la vida social y en los roles de pareja, lo que puede afectar a nuestras emociones. Hacerse a la idea de la maternidad/paternidad puede generar sentimientos de responsabilidad, expectativas y temores.
– Factores psicológicos: experiencias pasadas, apoyo social, nivel de estrés previo al embarazo y personalidad, también pueden influir en la forma en que una mujer experimenta los cambios emocionales durante el embarazo.
Si una mujer embarazada se siente abrumada por sus emociones o experimenta cambios emocionales significativos que afectan su bienestar general, es fundamental buscar apoyo y hablar con su médico o un profesional de la salud. El apoyo emocional durante el embarazo es esencial para garantizar una experiencia saludable y satisfactoria y evitar problemas que pueden ser más graves como la depresión.
Cambios emocionales en el primer trimestre de embarazo
Los cambios emocionales más habituales en estos primeros 3 meses son:
– Cambios de humor e irritabilidad: los cambios hormonales más acusados de estas primeras semanas pueden hacer que tus emociones cambien rápidamente y pases de estar feliz a llorar como una magdalena. Puedes sentirte más sensible, llorar con facilidad o enfadarte sin sentido. Habla con tu pareja de lo que sientas y pídele paciencia ya que es algo que no se puede controlar.
– Ansiedad y preocupación: en las primeras semanas es normal estar preocupada y angustiada por el miedo al aborto espontáneo o a problemas en el desarrollo del bebé. También puede darte miedo no estar preparada para afrontar todo lo que implica el embarazo, el parto y la maternidad. Informarte es la mejor opción para resolver estos miedos.
– Despistes y problemas de memoria: desde el primer momento del embarazo es normal sentirse despistada, olvidarse de las llaves, meter la cartera en la nevera o no acordarse de las citas médicas. Tranquila, es algo normal que se va pasando. Apúntate las cosas importantes y no te angusties por este síntoma.
Cambios emocionales en el segundo trimestre de embarazo
– Tranquilidad y felicidad: en este segundo trimestre las hormonas se estabilizan y los molestos síntomas del primer trimestre desaparecen, por lo que es normal sentirse con más energía y felicidad. También es normal estar más tranquilas y relajadas.
– Amor y conexión: al empezar a notar las pataditas del bebé se hace más real su existencia, lo que puede favorecer los sentimientos de amor y conexión con el peque.
Cambios emocionales del tercer trimestre de embarazo
– Miedo al parto: el temor al dolor, a lo desconocido, a que ocurra algo malo en el parto… puede hacer que sientas miedo y angustia ante la llegada del parto. Para librarse de este miedo lo mejor es informarse bien sobre las fases del parto, métodos de manejo del dolor, posibles problemas que pueden surgir… Habla con tu médico y prepárate con los cursos de preparación al parto.
– Síndrome del nido: con motivo de la inminente llegada del bebé, la mujer necesita tener toda la casa limpia y ordenada, lo que puede llegar a convertirse en una obsesión. Hay que tener cuidado de no llevar a cabo tareas que sean peligrosas para la salud de la madre, como subirse a un alto.
– Miedo a la maternidad: también es normal que, en estas últimas semanas, sientas miedo a no ser una buena madre, no saber cómo cuidar al peque, hacer algo mal, no sentirse como esperas… De nuevo, lo mejor es que hables con tu pareja de cómo te sientes y con otras mujeres que están pasando por mismos o ya han pasado por ello para que veas que estos miedos son habituales, pero que se pasan en cuanto tienes a tu bebé en brazos.
Síntomas de alerta
Todos estos cambios son normales y solo necesitan apoyo y comprensión por parte de tus familiares y de ti misma. Sin embargo, durante el embarazo y el posparto hay más riesgo de desarrollar depresión, por lo que debes estar atenta a los síntomas de alerta para buscar la ayuda de un profesional de psicología si hace falta:
– Sentimientos persistentes de tristeza o desesperanza.
– Pérdida de interés o placer en actividades que antes eran placenteras.
– Cambios en los patrones de sueño, como insomnio o hipersomnia.
– Fatiga o falta de energía.
– Cambios en el apetito, con pérdida o aumento significativo de peso.
– Sentimientos de culpa o inutilidad.
– Dificultad para concentrarse o tomar decisiones.
– Agitación o ralentización psicomotriz.
– Pensamientos de muerte o suicidio.
En este caso, es importante buscar ayuda profesional cuanto antes.
Fuentes:
Huggins-Cooper, Lynn (2005), Maravillosamente embarazada, Madrid, Ed, Nowtilus.