Si la lactancia materna dura más allá de los 6 meses, es posible que a tu bebé comiencen a salirle los dientes de leche y, con ellos, muerda algunas veces tu pezón, causándote dolor e incluso heridas. ¿Cómo actuar en estos casos?
¿Por qué mi bebé me muerde el pezón?
En los primeros meses de vida, la forma de explorar y conocer el mundo que tienen los bebés es llevarse todo a la boca, por lo que es normal que se pasen el día chupando y mordisqueando juguetes y todo tipo de objetos.
Por eso, cuando le salen los primeros dientes de leche, algo novedoso para él, es normal que pruebe a morder todo aquello que se lleva a la boca, incluido el pezón de su madre. No lo hace por molestar ni por hacerte daño, simplemente, está explorando y descubriendo qué ocurre cuando cierra sus dientecitos sobre cualquier superficie.
De hecho, los bebés no muerden mientras están mamando activamente, sino que lo hacen en sus momentos de descanso. Es decir, no muerden accidentalmente mientras succionan para comer, sino que lo hacen mientras no maman.
Por lo tanto, la etapa de morder los pezones es algo habitual y la mayoría de los bebés pasan por ella en su desarrollo, por lo que no debes preocuparte, aunque sí debes saber qué hacer ya que no solo resulta doloroso, sino que puede llegar a causarte serias heridas que incluso dificulten la lactancia.
No obstante, también puede haber otras causas que lleve al bebé a morderte el pezón:
- Dolor o incomodidad en la boca por la salida de los dientes de leche. Fíjate si sus encías están rojas e inflamadas o está más molesto e irritable.
- Aburrimiento, por lo que debes procurar darle de mamar en una habitación sin distracciones y centrar tu atención en él.
- Respuesta positiva la primera vez que lo hizo. Si la primera vez que te muerde te ríes o le prestas atención, puede volver a repetirlo para llamar tu atención de nuevo, sin entender que te hace daño. Es más habitual en bebés de 8-9 meses.
- Quiere más leche. A veces, cuando el suministro de leche baja por diversos motivos (crisis de lactancia, crecimiento del bebé, estrés), el bebé puede ponerse nervioso al ver que no sale tanta leche como quiere y puede morderte al tratar de obtener más leche.
- También puede ocurrir si está resfriado y la mucosidad dificulta la respiración, por lo que puede sentirse agobiado al mamar y no poder respirar, mordiendo como consecuencia.
- Algunos bebés muerden al comienzo de la toma para detener el flujo de leche ya que se sienten agobiados al obtener tanta leche. Si tu bebé muerde al principio de la toma, colócalo con la cabeza más inclinada hacia atrás.
- Mordisco involuntario al quedarse dormido.
- Un mal agarre o problemas en la succión.
¿Qué hacer si mi bebé me muerde al darle el pecho?
Como decíamos, no debes permitir que te muerda ya que puede hacerte mucho daño e incluso motivar que abandones la lactancia materna antes de tiempo. Por ello, si tu bebé coge la costumbre de morderte el pezón debes hacer lo siguiente:
- Di “no” de forma clara y rotunda mirándole con cara muy seria para que comprenda que eso no te gusta. No hace falta gritar, ya que eso puede asustarle. Solo debes ser muy clara y seca.
- Retírale con cuidado el pecho de la boca, pero sigue teniéndole en brazos para que no piense que le rechazas a él, solo su acto. Después puedes volver a ofrecerle el pecho, diciéndole que no vuelva a morderte que te hace daño. Por muy pequeño que te parezca, ya entiende mucho más de lo que crees.
- Si vuelve a morderte, repite el proceso las veces que haga falta hasta que entienda el mensaje y deje de hacerlo.
- Si se pone a llorar, puedes consolarle, pero diciéndole a la vez que te ha hecho daño. Cuando se calme, puedes volver a ofrecerle el pecho.
¿Cómo hacer para que el bebé suelte el pecho?
Si el bebé te está mordiendo el pezón y no lo suelta, debes actuar con cuidado para no hacerte daño. Para soltarte, introduce un dedo en el lateral de su boca para hacer que la abra. Si es un poco mayor, dile claramente que te suelte que te está haciendo mucho daño.
¿Cómo evitar que vuelva a morderme?
Para evitar los mordiscos del bebé durante la lactancia lo primero es identificar su causa:
- Si el problema son las molestias causadas por la salida de los dientes de leche, ofrécele mordedores fríos para aliviar la inflamación y el dolor sin que tenga que recurrir a tu pecho.
- Si te muerde al quedarse dormido, retira el pecho justo antes de que se duerma del todo. Introduce un dedo en su boquita para que sea este el que reciba el mordisco.
- Si lo que busca es llamar tu atención, no le hagas caso cuando te muerda y evita hacer otras actividades mientras le das el pecho para que note que toda tu atención está en él y que no hace falta que te muerda para que le mires.
- Si el problema es un mal agarre, busca ayuda de una asesora de lactancia y recuerda que su boca debe abarcar el pezón y parte de la aréola, teniendo la boca bien abierta y las mejillas infladas. Además, su cuerpo debe estar bien pegado a tu pecho.
- Si se aburre, procura quitarle el pecho cuando notes que ya no tiene hambre y comienza a distraerse para evitar que llegue a morderte.
- Si le agobia mucha leche al principio de la toma, sepárale tú antes de que se ponga nervioso y te muerda.
- Dar el pecho con el bebé sentado a horcajadas puede evitar que te muerda.
En todo caso, debes tener mucha paciencia y no ponerte nerviosa, aunque te siga mordiendo. Algunos bebés tardan unos días den dejar de hacerlo y otros, un poco más. Pero con paciencia, se soluciona.
Fuentes:
AEP. Asociación Española de Pediatría. Preguntas frecuentes sobre lactancia materna. Disponible en https://www.aeped.es/comite-nutricion-y-lactancia-materna/lactancia-materna/preguntas-frecuentes-sobre-lactancia-materna#t48n163
Asociación Española de Pediatría. Mi hijo me muerde. ¿Qué debo hacer? Disponible en https://enfamilia.aeped.es/edades-etapas/mi-hijo-me-muerde-que-debo-hacer